La sirena verde
Abrió el cofre
Dentro del estaba el corazón
Helado del pirata azul
Con el nombre
De la princesa grabado
En el centro
Y con una nota que decía
“Mi dulce princesa
Haz logrado recatarme
Te ruego volver a darme el amor
Y la ilusión de tus besos
El calor de tus ojos
Y el estupor de tus brazos”
La sirena celos sintió
No puede soportar el amor
La princesa ha llegado
Al rescate del corazón
Del fondo del mar
Surgen las criaturas marinas
Pobre princesa
Luchando contra la sirena
Una lucha entre el mar y el cielo
Entre las estrellas y las criaturas marinas
Dispuestas a atacar
A matar a la princesa
La sirena no es más que el
Odio de el mar a la princesa.
La sirena ha sacado
Un tridente
Ataca a la princesa
Con una briza especial
Pobre princesa,
Está perdiendo
La sirena esta atacándola
Con lo más doloroso
Los recuerdos del pirata
Las penas del amor
El dolor de la separación
Y el beso del príncipe
En los labios de la princesa
Entonces la princesa comprendió
Que la sirena había ganado
Y a cambio le dio a la sirena
El polvo de su esperanza
Nada podía hacer ya la princesa
La sirena la tenía,
El brillo de sus ojos había desaparecido
No había vida en ellos
La sirena habiendo ganado
Sale a la vista del pirata,
Radiante, bella como la espuma
Y fresca como la brisa
Le entrega el corazón
Y el pirata no entiende la razón
Sabe que ella no es la princesa
Y que por tanto
No la ama como a ella.
La sirena al darse cuenta
Lanza un hechizo al corazón
Antes de dárselo
Que hará que el la ame
Y la vea como si fuera la princesa
Mientras la verdadera princesa
Sin vida y sin ilusión
Esta atrapada en el arrecife
Del dolor custodiada por tiburones
Y bestias abismales
La luna, las estrellas
Llorando están,
Mandan a las nubes a vigilarla
Mandan al mismo príncipe a recatarla
No hay más posibilidades para la princesa
Esta muerta ya
Mientras la sirena
Ocupa su lugar
Y en el fondo del corazón
El pirata, sabe que
Esa no es su princesa
Sus besos
Sus labios
Sus ojos
No son los mismos
¿Qué hará despertar al pirata?
¿Quién lograra rescatar a la princesa?
Nadie lo sabe, ni la luna
Ni el mar, porque ambos
Peleados están.
Autor: Daniela Trejo
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